martes, 9 de marzo de 2010

RELIGIÓN

Los mayas eran politeístas, y fabricaban innumerables ídolos de piedra; tenían 12 dioses principales, y un sin número de dioses menores, a la cabeza de todos ellos se encuentra Itzmaná el dios creador; venía de oriente y era la imagen del sol, representaba la luz, la vida y la sabiduría.

Itzamná se vincula con el dios Sol, Kinich Ahau, y con la diosa Luna, Ixchel, representada como una vieja mujer endemoniada.

Cuatro genios o divinidades, los Bacabs, por otra parte, aparecen como sostenedores del cielo, identificados con los cuatro puntos cardinales que, a su vez, se asocian con colores simbólicos (Este: rojo; Norte: blanco; Oeste: negro; Sur: amarillo), un árbol (la ceiba sagrada) y un ave.

Otro de los grandes dioses era Kukulkán, que recibe el nombre de Gucumatz, en las tierras altas de Guatemala y que ha sido identificado como Quetzalcóatl (dios mexica de la creación); era el dios de la sabiduría y la inteligencia, los antiguos mayas le atribuían a él la creación de su forma de vida.

Chac, el dios de la lluvia; representado una larga nariz.

Kisin, dios de la muerte; se le representa como un cuerpo podrido, con una cabeza calavérica con campanas y collares de huesos y plumas.

Ek Chuah, dios negro de la guerra, y de las plantaciones de cacao; tenía bajo su mando, a siete guerreros negros.

Ixtab, diosa del suicidio, los guerreros que morían en combate, las víctimas de los sacrificios ofrecidas a los dioses, las mujeres que morían en el parto, los sacerdotes y los suicidas iban directamente al cielo tras su muerte; Ixtab descendía del cielo a recoger sus almas y las conducía al paraíso.

Yum kaax, diosa del maíz, presidía las cosechas, el matrimonio, los frutos, la fertilidad, la prosperidad y la abundancia.

Kaman Elk; estrella del norte y guía de los mercaderes.

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